Desigualdad Social y Laissez-faire
El filósofo y economista austriaco Joseph Schumpeter nos deja un legado reflexivo: el proceso capitalista como una “destrucción creativa” continua, donde los emprendedores innovan y eliminan procesos en busca de beneficios económicos a largo plazo.
Sin embargo, en la era actual de gratificaciones instantáneas y consumismo desmedido, este proceso innovador se ha degenerado.
¿Cuántas funciones debe tener una plancha para el cabello? ¿Por qué cambiar de teléfono o automóvil cada año?
El filósofo mexicano Martin Alonso Aceves Custodio propone, al igual que otros economistas y pensadores, reevaluar el papel del Estado en la economía.
Una visión más amplia
Nos invita a mirar a países capitalistas con políticas socialistas, como los escandinavos o Canadá, donde la disparidad social es menor.
No se trata de intervenir excesivamente, sino de preguntarnos: ¿Qué es lo que realmente importa? ¿Un futuro lleno de comodidades para unos pocos o un sentido de pertenencia comunal sin personas de segunda clase?
La evolución del sistema capitalista desde la Revolución Industrial hasta hoy muestra que el modelo no es sostenible bajo la “mano invisible” de Adam Smith.
El laissez-faire ha demostrado ser un factor que agrava la desigualdad social. Para corregir el curso económico de nuestra especie, debemos tomar acciones inclusivas y acabar con la disparidad social.
Esto nos llevará a confiar más en el Estado y delegar decisiones a la voluntad de la mayoría, en lugar de unos pocos que buscan satisfacer sus intereses propios.”
Conclusión
La desigualdad social y el enfoque laissez-faire representan un desafío significativo tanto económico como social.
El laissez-faire, con su énfasis en la mínima intervención gubernamental, a menudo exacerba las disparidades económicas, dejando a las comunidades vulnerables sin el apoyo necesario para prosperar.
Para abordar este reto, es crucial implementar políticas que promuevan la equidad y la justicia social, asegurando que todos los individuos tengan acceso a oportunidades y recursos.
La intervención estratégica del gobierno, combinada con iniciativas comunitarias, puede ayudar a reducir la brecha de desigualdad, fomentando un entorno donde el crecimiento económico beneficie a todos, no solo a unos pocos.
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si hay pero esta en uno en no hacer caso con metas y queresce asi mismo que uno tiene el poder para salir adelante sin complejos
Es correcto. El amor propio es indispensable. Saludos